Cada mañana el hombre de campo se
despierta y lo primero que llama su atención es el estado del tiempo.
El productor y el profesional de campo que viven en la ciudad se comunican
y preguntan: ¿cómo está el tiempo?, ¿llovió?, ¿hace calor?, ¿hubo
helada?, ¿cuánto llovió?, pendiente en todo momento de las variables
meteorológicas que condicionan su producción.
No es novedad que las plantas y los animales, sin tener reloj ni
calendario, reconocen la llegada de las estaciones por las temperaturas y
la duración de los días, respondiendo con procesos de brotación,
floración, celo, postura de huevos, etc, etc según les indiquen
"sus propios sensores".
De la misma manera, en cada lugar en particular, las condiciones
microclimáticas intervendrán en el desenvolvimiento de vegetales y
animales, no sólo en sus ciclos, sino también en el de las plagas que
los atacan, y en las labores que acompañan el proceso productivo.
Van a continuación una serie de ejemplos de la influencia de los
elementos del tiempo y del clima sobre plantas y animales, así como de la
forma en que pueden monitorearse con una Estación Meteorológica
Automática DAVIS a través de "sus propios sensores". Los datos
han sido obtenidos en casi todos los casos de una Estación Meteorológica
Automática DAVIS modelo Vantage Pro, y cedidos gentilmente por el señor
Aran, quien consulta la situación meteorológica de "su campo"
mediante el uso de su teléfono celular con conexión a Internet.
TEMPERATURA
Los valores medios y sus variaciones o amplitudes (máximas y mínimas)
representan la acumulación de energía de las plantas, mediante la suma
de temperaturas o grados/día (GDU) que deben reunir para cumplir cada
etapa de su ciclo. Así, en el siguiente ejemplo, se sumarán grados para
el maíz por encima de los 10 ºC como se ve en el siguiente cuadro,
alcanzando los 700 ºC/día el 1º de Enero cuando estará listo para
floración.
Cada año la acumulación se alcanzará en diferente fecha, dependiendo del comportamiento
meteorológico del mismo, y su estimación permitirá prever la fecha de ocurrencia de floración, maduración, etc, y su posible rendimiento.
También las temperaturas máximas tendrán que ver con el estrés térmico (por encima de los 35 ºC, por ejemplo, en el maíz). Y las
mínimas están directamente relacionadas con la acumulación de las horas de frío, tan importantes en los cereales de invierno, frutales de carozo
y pepita, y frutas finas como el arándano.
Aquí se ve cuantas horas se acumularon desde principios de Mayo hasta principios de Agosto en un establecimiento de Tres Arroyos.
En cuanto a la marcha de la temperatura mínima permitirá observar la duración --- e intensidad --- de la helada ocurrida al amanecer, indicando el momento exacto de comenzar con el control de la misma, o prever sus daños. Como se aprecia en el gráfico obtenido de la Estación, la temperatura mínima alcanzo los -5.0 ºC y la helada duró aproximadamente 9 horas, en una época altamente sensible para el cultivo de arándanos que estaban en floración.
Su monitoreo en cuanto a sus valores medios y extremos, combinados con la temperatura del aire, permite pronosticar el ataque de determinados patógenos que ataquen plantas y animales.
PRECIPITACIONSu medición en cantidad, duración e intensidad, permite estimar la
recarga de agua al almacenaje del suelo, prever inundaciones y pronosticar
ataque de enfermedades por mojado de hoja, entre otras utilidades.
Aqui se observan los 98 mm precipitados el 22/02/05, y en el gráfico de
más abajo, como se distribuyó dicha precipitación, con intensidades de
hasta 19 mm/hora, sobrepasando totalmente la capacidad de infiltración
del suelo, que ya venía de una precipitación del día anterior de 28 mm.
Estas lluvias no fueron almacenadas en el suelo casi en un 90%.
Conociendo su dirección, velocidad media y ráfagas se puede prever
dispersión de plagas, hacer eficientes las pulverizaciones terrestres y
aéreas, instalar cortinas de la manera más adecuada para evitar o
disminuir roturas, vuelcos, caída de flores y frutos, aprovechamientos
eólicos, etc.
Se observan aquí ráfagas de hasta 60 km/hora, cuando la media apenas
indica 20 km/hora, haciendo imposible toda aplicación por pulverización
aérea o terrestre.
Las mediciones de intensidad y duración permiten estimar la energía acumulada por el cultivo, y por ende, su posible rendimiento.
Con los datos anteriores de temperatura, humedad, viento y radiación solar se estima la ET cuyo valor en milímetros representa la necesidad de agua del cultivo, y permite calcular la necesidad de riego, y la posibilidad de estrés hídrico en caso de no contar con riego. Aquí se ve gráficamente la demanda diaria y el adecuado aporte de la precipitación en los momentos críticos del maíz, lo que posibilitó altos rindes del mismo.